De la acelerada mente de algunos de los miembros de formaciones como los vitamínicos Tokyo Sex Destruction o los enérgicos Stand Still, nace este alocado proyecto que lleva por nombre la repetición sincopada de algunas palabras, muy en brecha en los últimos meses, a raíz de algunas bandas internacionales de rock-punk de nueva hornada. Y un poco en la línea de algunas de las propuestas más gamberras que ha marcado el electro-clash en los últimos tiempos. Raúl, Rubén, Joel y Piti vienen a presentarnos su álbum de debut, "Giving everything", en el que realmente demuestran darlo todo, como recita su título. Mezclando el punk con la electrónica, pasando por el rock con algún toque añejo remontado a la década de los ochenta y el movimiento post-punk, sobretodo por la intencionalidad en el timbre de voz y algún pasaje destacado en ciertos riffs.

"Giving everything" se compone de once cortes, en el que de los simples títulos se extrae la esquizofrénica idea que sobre el ritmo poseen estos cuatro catalanes, llegando a mezclar incluso algo de groove y funky en su propuesta. Una propuesta del todo desafiante y descarada para ser la primera referencia que tenemos sobre ellos, y de la que caben destacar temas como "Cha cha cha love", "I’m a hamster" o "Supermarket crisis". Lo bueno será comprobar como trasladan al directo tan descabellada idea, en la que por encima de samplers y guitarras resaltan unas orejas puntiagudas, toda una sorpresa. Mientras nos invitan a la fiesta y al descontrol, a la movida nocturna y a la diversión, solo para pasarlo bien y disfrutar del momento, la plena modernez vaya, a la que también parodian en cierta forma.

Veremos si la idea sigue adelante como colectivo, o si por el contrario se queda en simple anécdota que estos jóvenes tenían ganas de experimentar. Lo que queda claro es que siempre podrán presumir de no tener nada que envidiar a ninguna formación foránea, demostrando estar a la altura de muchos, y con una creatividad al alcance de pocos.

Una pasión puede arrasar con todo. Puede hacer que pierdas el mundo de vista y que lo des todo por ella. Te eleva y te hunde con una facilidad espasmosa, te hace pasar de un extremo al otro sin apenas darte cuenta. Y todavía es menos llevadera cuando pasa de pasión a obsesión. Cuando si te falta eso, es como si te faltara el aire que necesitas para vivir. Con el amor por la música sucede lo mismo, y puede ser delirante. Aunque si mantienes el ansia por estar ahí, nadie te puede quitar por lo menos eso.

Esto es lo que les ha sucedido a muchas formaciones nacionales, con más o menos suerte en el discurso de su carrera. También es el caso de estos cuatro navarros, Half Foot Outside, que llevan ya prácticamente una década profesando esos sonidos atemporales y personales que se mueven entre el rock de guitarras agresivas y cierto afectismo lírico. Por ese motivo, en cierto periodo de tiempo efectivo, han ido acogiendo su espacio dentro de los sonidos promovidos al margen de la industria, llegando incluso a la autoedición. Contando, en todo momento, con el soporte del sello barcelonés B Core.

"It’s being a hot hot summer" está formado por nueve piezas. Como apertura contamos con un tema tan oscuro como directo como puede ser "In/Out", para ir aflojando la tensión depositada en un principio a lo largo del resto del álbum, aunque con sus subidas y bajadas que pueden dar un vuelco a las estructuras construidas.

La brevedad con la que Carlos, Brian, Edu e Israel narran sus historias son dignas de merecer, porque no por ello dejan de perder la claridad en sus relatos que van directamente al grano. Habrá que ver exactamente hacia donde dirigirá el tiempo a estos muchachos con tantas ganas volcadas por el trabajo bien hecho. Deseamos que por el camino bueno.

Por entre guitarras desgastadas, acordes ásperos, y ciertos toques de cuajada emotividad, Enric, Guillem, Oriol y Pablo, vuelven a meterse en el ojo del huracán para presentarnos su segundo disco, tras su trabajo de debut titulado como ellos mismos. Estos barceloneses, bajo las directrices del sello que los ha visto crecer, nos acercan de manera desmarcada a sonoridades movidas por la solidez de unas composiciones cargadas de derramada potencia.

"An Investment In Logistics", nos introduce en el campo de nuestras impresiones más enérgicas, ofreciéndonos un total de once cortes que destacan por su inmune carácter y rotundidad, con piezas como "Prayers for time" o "Nicorette" de natural tendencia "emo". Dejandose deslizar por melodías retorcidas, para cambiar de registro y desviarse hacia posturas mucho más delicadas en su forma y contenido.

Todo eso, arrastrando tras de si multiplicidad de directos, como teloneros, o no, horas de sudor, de ensayos, y en general de todo lo que a un grupo novel le concede las tablas necesarias para mostrar sus cartas y tomar un nombre dentro de la minimalista escena indie patria.

Demostrando así que la llama que quema dentro de The Unfinished Sympathy, arde más que nunca y que todavía queda mucha mecha por desgastar en su interior, mirando de hacerla centellear de manera progresiva, sin prisa, pero sin pausa, aunque con cierto decoro.

La gente de B Core nos ha venido demostrando durante este tiempo, que apuesta por formaciones noveles interesantes, sean del estilo que sean. Simplemente se involucran en aquellas propuestas que piensan tienen todas las tablas para demostrar su validez. Esto es lo que les ha ocurrido con Les Philippes, catalana formación con gusto por las melodías pop frescas, los beats repetitivos y cierto aire de psicodélia de los sesenta. En un entorno en el que acogen su peso los riffs de las guitarras y el batir de una batería despierta.

Tras varias maquetas en su haber, este cuarteto consigue con "Philharmonic Philanthropy" arrancar justo eso, dosis de sonidos redondos que actúan como una capa, envolviéndonos en parábolas distorsionadas y psicotrópicas que nos remiten a antiguas formaciones. Pero dónde también dejan prever su gusto por la fusión y el entrelazado que conlleva transportar esas melodías a un muy actual presente. Hecho que han probado ya algunas formaciones nacionales con más o menos éxito.

Así que en este álbum, lo que no hemos de pretender hacer es hallar algo nuevo. Un sonido correcto, unas composiciones bien acabadas, eso sí. Pero lo único que hemos de tratar es de disfrutar de esos trece cortes que dan forma al trabajo y en el que podemos degustar piezas como "(you’re my) Cabaret Song", "Swimming In My Eyes" o "Colour Stew".

Otro giro en el calidoscopio formado por la quintaesencia del panorama indie patrio en el que ya encontramos un buen fajón de figuras que podrían dar forma a un movimiento por si solo, aunque vayan cada una a su aire. Demostrando de ese modo, que nada hay que echar en falta en cuanto a calidad se refiere, a la hora de hacer comparaciones con lo de fuera.

Cuando uno ya lleva años en el mundo alternativo musical tratando de compartir lo que siente y lo que piensa en un circuito bastante estrecho; ya no se regira pensando si gustará más o menos, o si quizás algún día viva de lo que realmente le gusta, porque le da igual. Lo único que le importa es hacer buenos temas que le llenen y que hagan sentir algo a alguien. Eso es suficiente para sentirse reconfortado, y eso es lo que ha hecho que la gente de Nueva Vulcano extrajera este primer "Principal Primera".

Nueva Vulcano proviene de miembros de formaciones anteriores como Aina o Shanty Rd., es por ello que son expertos en ofrecer ese ruidismo de guitarras enroscadas en actitud punk y de gran potencia emotiva y directa. Han apostado por unos textos en castellano que rozan la oscuridad más afectada, en un tono de voz a medio desvelar en según que temas, como en "Rima Disonante" dónde las palabras se dejan oír a ráfagas, entremedio de la fiereza de las guitarras y percusiones.

He aquí la presentación de unos expertos en el terreno musical al margen de los circuitos de venta masivos, y es que el rodaje tras estos años no ha sido en vano, ya que con Nueva Vulcano comtemplamos a la perfección las dotes adquiridas por los miembros de la banda durante todo este tiempo, sobretodo a raíz de dejarse la piel en los directos.

Desesperanza, aislamiento, mundo rasgado interior evocado a través de la garganta de Albert Guardia, que junto a sus compañeros de batalla, Wences Aparicio y Artur Estrada, siguen luchando para ofrecer nuevas propuestas en el novel panorama actual estatal. La diferencia es que esta vez ya no les importará tanto el que dirán.

Las sensaciones no siempre están definidas por un factor común que las hace inexcutrables. Algunas veces, tras aquello alegre, se esconde una tristeza infinita y tras lo que pueda parecer a simple vista una manifestación de ahogo sollozante, se esconde aquella frase del "tampoco se está tan mal". La ambigüedad es dueña de nuestros sentimientos, y nosotros nos dejamos arrastrar hacia a ella, de modo perezoso, sin hacer el mínimo esfuerzo por cambiar nuestra situación, o al menos creérnoslo.

Esto es lo que me sugiere "Co-pilot" de estos tres muchachos catalanes que conforman Happy Meals. En sus textos y composiciones existe un tipo de melancolía alegre, a la vez que una alegría entristecida y apagada. Algo complejo de expresar. Quizás sea debido a esta mezcla de melodías que componen el álbum, acercándose tanto al pop, al rock, como al "emo", que te dejan esa sensación de no saber exactamente con cual de esas emociones que te producen su sonido, te sientes identificado.

Guillem, Albert y Roderic, presentan su trabajo a través de cinco cortes grabados entre Barcelona y la Seo de Urgel en Septiembre de este año. Quizás el cambio de estación, haya calado hondo en sus biorritmos y haya hecho dar forma a un álbum como el que tenemos entre las manos. En todo caso sería algo que llevan por dentro.

Temas como "Drowing In You", con la voz de Laura de Maple de acompañamiento, "Alias" o "Carved On Stone" nos muestran como este trío de jóvenes catalanes van a tratar de ofrecer lo mejor de si mismos en su andadura por el universo del panorama alternativo nacional. Esperemos pues, a que las cosas se vayan sucediendo.

A veces, en la vida de uno hay que escoger, o seguir adelante con un proyecto en el que has volcado todas tus ilusiones, todas tus ansias y fuerzas, o retirarte en el momento en el que crees ya haber dicho todo lo que tenías que decir. En el universo indie, ésto no es para menos, y a parte se le puede añadir el hecho de no vivir al cien por cien de ello y a dedicarse a otros menesteres, como ocurriera a principios del movimiento con algunos grupos ya desaparecidos.

El caso es que tras años de pelea, mostrando su música al mundo, los catalanes Aina se separan, pero lo hacen por la puerta grande y con la cabeza bien alta, dejándonos como testigo un E.P con algunas de las grabaciones que realizaron para la emisora británica BBC en compañía de John Peel. Aunque aquí nos dedicaremos a comentar uno de sus penúltimos E.P’s, este "Chrysanthemum e.p" de este mismo año y que sirve de colofón a su despedida.

Con cuatro cortes en su haber, "Cat & Dog", "Internacional Event", "Catalina" y "Cat & Dog TV", este E.P nos muestra la diversidad más arraigada en la profundidad de esta banda que apuesta/ostaba por el slow-core, el rock y los tintes indies más guitarreros.

Sólo nos queda desearle la mayor de las suertes a cada uno de los miembros de la banda en sus próximas incursiones en el universo musical, ya sea encima de un escenario, como detrás de un estudio, porque de tablas no les faltan y tras años de experiencia siempre podan guiar los pasos de nuevos proyectos de la cultura alternativa nacional.

Aprovechando el lanzamiento de "Giving everything" de It’s Not Not, que ya presentamos la pasada semana y de la que forman parte miembros de otras bandas de la escudería que conforman este sello barcelonés que ya lleva algunos años cumpliendo los sueños de algunas formaciones noveles en el tumultuso camino de darse conocer a pequeña o gran escala; B Core ha decidido editar, casi simultáneamente, un compacto de dieciocho cortes, que recoge algunas de las referencias que le han dado nombre, como sería Standstill, Aina, Half Foot Outside, Tokyo Sex Destruction, Delorean, Nueva Vulcano, It’s Not Not (como ya decíamos), Les Philippes (su referencia más pop), Madee, Happy Meals, Nisei, G.a.s Drummers, Maple, The Unfinished Sympathy, Zeidun, No more lies, Getreal y Shanty Rd.

"Dándolo Todo" pues compila algunos de los singles o temas más destacables del sello por antonomasia "emo-rock" del panorama independiente nacional, etiqueta (quizás más impuesta por el entorno que auto-proclamada) de la que con laboriosidad y tesón se han ido deshaciendo hasta la incorporación entre sus filas actualmente de formaciones como Les Philippes, que siguen la línea del pop más psicodelico de tintes setenteros y entalle clásico, así como Delorean, que profesan un post-punk oscuro, remezclado con dosis de electrónica, llegando finalmente a esos It’s Not Not, rara avis nacional, en el que se unen a partes iguales el punk, el pop-rock, la electrónica y el soul. Y pasando, por supuesto, por su banda más exportable (o exportada) como es en estos momentos Tokyo Sex Destruction. Toda una lección de eclecticismo, vaya.

Buen momento pues, para realizar un recopilatorio, coincidiendo además con el aniversario del sello, y buen momento para descubrir a algunas de sus bandas, si es que no lo has hecho ya y eres seguidor incondicional de todo lo que publican. Esperando que les funcione tan bien como hasta ahora al margen de lo que vayan o no consiguiendo por el camino, pero siempre podrán decir que como mínimo anduvieron dándolo todo.